Villahermosa, la capital del estado de Tabasco, tiene una historia profunda y significativa detrás de su nombre, que refleja tanto su pasado colonial como su evolución a lo largo de los siglos.
La ciudad de Villahermosa, cabecera del municipio de Centro, toma su nombre del título otorgado por el rey Felipe II de España en 1598, cuando le concedió el título de “Villa Hermosa de San Juan Bautista”. Este nombre no solo hace referencia a su ubicación y fundación, sino que también refleja la devoción religiosa de la época, al ser dedicada a San Juan Bautista. Además, se le otorgó un escudo real que aún es utilizado para identificar al estado de Tabasco.
Con el paso del tiempo, el nombre de la ciudad sufrió varias modificaciones. A lo largo de los siglos, la ciudad fue conocida de diferentes formas, pero fue en 1916, durante el gobierno de Francisco J. Mújica, cuando un cambio significativo ocurrió. En medio de un contexto de persecución religiosa, el gobernador decretó eliminar la parte del nombre “San Juan Bautista” para dejar simplemente “Villahermosa”, que debía escribirse de forma unida, sin el uso del espacio que antes separaba las palabras.
Este cambio, aunque aparentemente simple, marcó un giro en la identidad de la ciudad, que desde entonces ha sido conocida como Villahermosa, manteniendo un vínculo con su legado colonial y religioso, pero con una identidad más centrada en su crecimiento moderno y su desarrollo como la principal urbe de Tabasco.
