En el vibrante estado de Tabasco, la música es mucho más que una forma de entretenimiento; es una expresión cultural profunda y arraigada que narra historias, tradiciones y la esencia del pueblo tabasqueño. Las canciones tradicionales de Tabasco son un reflejo de la rica herencia cultural del estado y continúan jugando un papel crucial en las festividades y celebraciones locales.
Las canciones tradicionales de Tabasco tienen sus raíces en las antiguas culturas mayas y chontales, y han evolucionado a lo largo de los siglos para incorporar influencias españolas y africanas. Este crisol cultural ha dado lugar a una variedad de géneros musicales y estilos que son únicos en la región.
Entre las canciones más emblemáticas de Tabasco se encuentran:
- “Vamos a Tabasco”: Esta melodía popular, compuesta por Pepe del Rivero, es una de las más representativas del estado. Con sus letras “Dicen por ahí un consejo que va prendido en el tiempo, si quieres llegar a viejo, si quieres vivir contento”, es inmediatamente reconocible en todo el país. La línea “Ven, ven, ven, vamos a Tabasco, que Tabasco es un edén” hace que todos identifiquen al estado con esta alegre melodía.
- “Orgullo del Sur”: Compuesta por Antonio Pérez Marín, conocido como El Pintor Musical de Tabasco, esta canción es un emblema de la identidad tabasqueña. Con su estribillo “Cuando vengas a Tabasco pide que te den chorote, y le das su meneadita para que el shishito brote”, es interpretada por marimbas y tríos. La versión del Trío Usumacinta en los años 80 popularizó aún más la canción, que celebra la belleza del estado con el estribillo: “¡Qué lindo es Tabasco, Orgullo del sur, a un lado Campeche, también Veracruz!”.
- “El Tabasqueño”: Esta melodía, del compositor José Luis Peña Valencia, captura la esencia de la vida rural de Tabasco. Con la letra “Más tabasqueño me siento mi choca, si llevo puesto el chontal, el machete fajado en el cinto siempre que voy solo para el platanal”, la canción refleja el orgullo y las costumbres locales de los habitantes del estado.
- “La Caña Brava”: También conocida como “El indio enamorado”, esta canción, con música anónima y letra de Limbano Blandín Andrade, fue popularizada por la intérprete Dora María. La melodía destaca por su frase pegajosa: “Ay! Guayay que la caña verde; y ¡ay! que la caña brava; qué bonito es el querer cuando el amor no se acaba”, evocando la pasión y el amor en la vida cotidiana.
- “El Tigre”: Esta pieza de zapateado, escrita por Antonio de Dios Guarda, es un clásico en las escuelas y presentaciones de ballet folclórico de Tabasco. El ritmo característico de la flauta y el tambor es esencial en las actuaciones de danza folclórica, celebrando la energía y la vitalidad del estado. Guarda también es conocido por otros zapateados como “El sisguá”, “El gato negro”, “La flor de caña” y “La pulga en el calcetín”.
Las canciones tradicionales de Tabasco no solo se escuchan en festividades y eventos especiales, sino que también forman parte de la vida cotidiana de sus habitantes. Los músicos locales, conocidos como trovadores y rancheros, desempeñan un papel crucial en la preservación y transmisión de estas melodías a las nuevas generaciones.
Las festividades como la Feria Tabasco y el Carnaval de Villahermosa son ocasiones perfectas para disfrutar de estas canciones tradicionales en su contexto auténtico. Durante estos eventos, se realizan presentaciones en vivo que permiten a los visitantes experimentar la riqueza musical del estado de primera mano.