A casi dos meses de la jornada electoral, los esfuerzos de quienes buscaban un cargo de elección popular por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) se han redireccionado hacia el proceso interno para la renovación de la dirigencia estatal de este instituto político.
La diputada local Maritza Mallely Jiménez Pérez ha externado su interés por dirigir los destinos del tricolor y ahora, el excandidato a la diputación federal por el Sexto Distrito de la coalición “Fuerza y Corazón por México”, Cristian Emmanuel Jerónimo Álvarez, levantó la mano para ir en busca de esta encomienda.
En rueda de prensa, indicó que está listo para participar en el proceso interno, no obstante, será necesario contar con bases claras y, sobre todo, evitar prácticas que perjudiquen al partido, cuya votación bajó de 8 a 3% en la pasada elección, bajo la dirigencia interina de Miguel Barrueta Cambrano.
En ese sentido, luego que el actual líder de este instituto político no rechazara la posibilidad de ser parte del proceso por la dirigencia del PRI estatal, Jerónimo Álvarez mencionó que antes de eso, se debe trabajar en una “operación cicatriz” con excandidatos, militantes y simpatizantes.
“Miguel debería ponerse a pensar en esos resultados de la elección antes de apuntarse, él debió tener la obligación de cumplir antes de aspirar”, enfatizó, para luego señalar que no ha habido oportunidad de diálogo con el presidente interino, pues no le contesta ni las llamadas telefónicas.
El excandidato a una diputación federal, refirió que son tiempos de unidad y no de divisiones, por ello, confió en que el actual dirigente interino del partido, acceda al diálogo para encontrar soluciones a temas importantes para la militancia priista.
“Si la dirigencia no se abre a platicar temas, buscaré la forma de hacerlo, porque estamos en un momento crítico, le he hablado, no me contesta y es momento de que empiece a hacer operación cicatriz con todos”, reiteró.
Consideró que esta renovación de la dirigencia es crucial, pues una mala decisión puede llevar al PRI a la pérdida de su registro en el 2027, a como ya le ocurrió al PRD nacional.