Con la finalidad de reunir fondos para la rehabilitación del Centro de Enseñanza de Hemofilia, se lanzó el reto “Hemo 500” para reunir a igual número de “padrinos” dispuestos a aportar 250 pesos mensuales a la institución, señaló su directora María Luisa Bastar de Abreu.
Refirió que, a lo largo de este año, se brindó atención a 533 pacientes, cuyos tratamientos incluyen medicamentos con un costo superior a los 80 mil pesos por frasco de factor 7. La prioridad -dijo- es que quienes viven con hemofilia, tengan acceso a los fármacos, lo que ha impedido que se destinen recursos a otros rubros, como el mantenimiento del inmueble ubicado en la capital tabasqueña.
“A nivel mundial puede salir en 30 mil dólares el tratamiento de un paciente, unos gastarán menos y otros más, dependiendo gravedad del paciente. El otro día un joven se llevó 30 frascos de factor 7, cada frasco a nivel comercial vale 80 mil pesos y nosotros donamos una buena parte y salió bien”, recordó.
Destacó que cuentan con apoyo de médicos que se esmeran en la atención de los pacientes, y también, luego de la crisis por la pandemia de COVID-19, se cuenta con el apoyo de 9 personas que ayudan en las tareas administrativas y operativas del Centro de Enseñanza de Hemofilia.
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Sin embargo, aún hace falta destinar presupuesto a la rehabilitación de la infraestructura, a fin de evitar un mayor deterioro. “En pandemia se cerró el centro y se deterioró mucho, repararlo cuesta mucho dinero, no tenemos apoyos suficientes para salir adelante en la parte económica, pero seguimos trabajando, no nos queda de otra”, expresó.
Destacó que recibieron donaciones de Estados Unidos, pero fue insuficiente, ya que no funcionan los aires acondicionados, parte del piso se rompió y hay otros daños en el inmueble que requieren ser reparados.
Por ello, se lanzó el reto “Hemo 500”, a fin de encontrar a 500 “padrinos” que quieran donar 250 pesos mensuales, con la finalidad de reunir fondos que permitan la rehabilitación del Centro de Enseñanza de Hemofilia.
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“Quiero juntar 500 personas que donen 250 pesos mensuales pero que me digan: yo sí quiero. Llevamos muy pocos anotados, pero si eso se lograra, tendríamos una tranquilidad para seguir consiguiendo ayuda en el extranjero y en otros países también”, enfatizó.
Bastar de Abreu conminó a la población a sumarse a este reto y extendió la invitación para que visiten el centro donde se atienden a los pacientes con hemofilia y se brinda asistencia a sus familiares, para que constaten las condiciones en que prestan servicio.
“Espero que pronto salgamos de esa nube gris, porque no es negra sino es gris y ver la nuble blanca algún día, que espero que sea pronto”, asentó.
