Las tabasqueñas en situación y víctimas de violencia física utilizan en porcentaje muy bajo el número telefónico de emergencia 911, en comparación de las féminas de otras entidades del país, de acuerdo con las estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema de Seguridad Nacional (SESNSP).
Tabasco se destaca por las altas cifras de violencia familiar, pues en los primeros siete meses de este año, enero-julio, en la Fiscalía General del Estado (FGET), se iniciaron cuatro mil 701 Carpetas de Investigación por presuntos delitos de violencia familiar, que a la entidad colocan en el décimo tercer lugar nacional y primer lugar de los estados del sureste del país.
Son mas de 22 denuncias diarias, que serían apenas un 10 por ciento de casos, pues las cifras negras —todas las que no se denuncian— son un 90 por ciento.
La entidad registra una tasa de 177.2 casos por cada 100 mil tabasqueños de denuncias por el delito de violencia familiar, que está por arriba de la tasa promedio nacional que es de 129.9.
Tabasco se ubica un 119.5 por ciento arriba de Quintana Roo, donde se registraron tres mil 932 casos del delito de violencia familiar, según el SESNSP.
Mientras, Yucatán registra 87 presuntos delitos de violencia familiar, casi 5,400 por ciento menos que Tabasco.
En Tabasco, las mujeres casi no tienen acceso a realizar llamadas de emergencia relacionadas con incidentes de violencia contra la mujer, pues de las 32 entidades ocupa el antepenultimo lugar, sólo por arriba de Nuevo León y Sinaloa.
Muy por debajo de Yucatán y Quintana Roo, donde se registraron 1,579 y 1,401, respectivamente, llamadas de emergencia relacionadas con incidentes de violencia contra las féminas.
El mismo fenómeno ocurre con las llamadas de emergencia relacionadas con incidentes de abuso sexual, donde las mujeres de Tabasco están entre los último cinco estados con menos acceso a esa petición de auxilio, con solo 21 telefonemas, por debajo de Quintana Roo y Yucatán, en el décimo y onceavo lugar nacional, de féminas con acceso a llamadas de socorro, 182 y 118, respectivamente.
Igual, las féminas de Tabasco, se ubican entre las siete entidades con las menores cifras de llamadas de emergencia relacionadas con incidentes de acoso u hostigamiento sexual. Yucatán y Quintana Roo, se ubican en el noveno y octavo lugar con menos llamadas de mujeres que pasan por ese trance de las entidades del país.
En Tabasco se registraron en los primeros siete meses del año, 11 llamadas de emergencia relacionadas con incidentes de violación, que colocó a la entidad entre los últimos cuatro estados con menos telefonemas de auxilio de féminas. A diferencia de Quintana Roo, donde se registraron 99 llamadas, cifra en octavo lugar del país.
Hasta julio de este año, en la entidad se denunciaron ante la Fiscalía General de Tabasco, 196 casos de delitos de violación a féminas, y sólo el 5.6 por ciento de mujeres víctimas pudo realizar una llamada de auxilio.
En llamadas de emergencia relacionadas con incidentes de violencia de pareja, Tabasco se ubicó entre los nueve estados con menor número de comunicación telefónica, con mil 597 casos. La entidad fue la última de los estados del sureste.
A nivel regional, Quintana Roo utilizó mas ese mecanismo de auxilio, pues se ubicó en el tercer lugar nacional.
En llamadas de emergencia relacionadas con incidentes de violencia familiar, Tabasco ocupa el penúltimo lugar nacional en la utilización de este apoyo institucional, con mil 888 peticiones de auxilio.
El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública explica que los incidentes de llamadas de emergencia al 9-1-1 se recaban y sistematizan por el CNI a partir de 2016 con base en el Catálogo Nacional de Incidentes de Emergencia.
“El reporte de llamadas de emergencia al número único 9-1-1 proviene de los Centros de Atención de Llamadas de Emergencia que operan a nivel nacional, es remitido mensualmente al CNI por los Centros de Comando, Control, Cómputo y Comunicaciones de las 32 entidades federativas”.
Las llamadas de emergencia al número único 9-1-1 no son denuncias ante una autoridad, se trata únicamente de probables incidentes de emergencia con base en la percepción de la persona que realiza la llamada.
También señala que las estadísticas que se presentan permiten ampliar el análisis a casos posiblemente no denunciados de violencia contra la mujer captados por esas llamadas, que si bien, no desagrega el sexo en la estadística, “se supone una alta proporción de
víctimas mujeres en los incidentes considerados en este reporte”.
Roberto Barboza
