La Secretaría de Turismo del Gobierno de México desmintió cualquier vínculo laboral con la mujer que aparece en un video viral agrediendo al influencer Luisito Comunica; además, hizo un llamado al respeto y a evitar la discriminación.
La agresora no pertenece a la dependencia
A raíz de un video que circuló ampliamente en redes sociales el pasado 7 de julio, en el que se observa una confrontación entre una ciudadana mexicana y el influencer Luis Arturo Villar Sudek —mejor conocido como Luisito Comunica—, la Secretaría de Turismo (Sectur) emitió este lunes una tarjeta informativa para aclarar su postura frente a los hechos.
En dicho comunicado, la dependencia federal reafirma que la persona que se identifica como trabajadora de “Sectur” no forma parte de su plantilla, ni está adscrita a ningún área de la institución. Esta declaración busca deslindar cualquier responsabilidad institucional sobre la conducta de la mujer en cuestión.
Defensa de la libertad de expresión
Sectur aprovechó para reiterar su compromiso con la libertad de expresión de todas las personas, independientemente de los medios de difusión o los contextos en que se ejerza. Subrayaron que la libre manifestación de ideas es un derecho fundamental que debe garantizarse en cualquier espacio público o digital.
“La Secretaría de Turismo reafirma su compromiso con la libertad de expresión de todas las personas por cualquier medio de difusión o en cualquier tipo de manifestación”, indica el texto.
Llamado al respeto y condena al odio
La Secretaría también lanzó un enérgico llamado al respeto entre ciudadanos, al tiempo que condenó tajantemente cualquier tipo de violencia, xenofobia, discriminación o discursos de odio, al considerar que estos atentan contra la convivencia pacífica y el tejido social.
“Se condena la violencia, la xenofobia, la discriminación y el discurso de odio”, recalca la tarjeta.
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Contexto del incidente
En el video que dio origen al comunicado, una mujer confronta al creador de contenido, lo agrede verbalmente e incluso amenaza con denunciarlo, alegando que grababa sin consentimiento. La situación generó indignación entre usuarios de redes, quienes rápidamente identificaron a la mujer y difundieron que se ostentaba como empleada pública.
La rápida reacción de Sectur para deslindarse del caso busca frenar los señalamientos erróneos y reafirmar la postura del gobierno frente a este tipo de actitudes.
