Urge actualizar planes de desarrollo municipal en Tabasco
Raúl Guzmán Priego, la inminente entrada en operación del megaproyecto en Balancán y Tenosique exige la urgente actualización de sus Planes Municipales de Desarrollo.

El Colegio de Arquitectos Tabasqueños (CAT) ha emitido una señal de alerta estratégica para los municipios tabasqueños con estaciones del Tren Maya.
Según su presidente, Raúl Guzmán Priego, la inminente entrada en operación del megaproyecto en Balancán y Tenosique exige la urgente actualización de sus Planes Municipales de Desarrollo.
Esta acción no es un mero trámite administrativo, sino un paso vital para garantizar que el nuevo flujo de turismo e inversión se traduzca en bienestar local y crecimiento ordenado.
Guzmán Priego enfatizó que el rediseño de estos documentos rectores es fundamental para blindar a los habitantes de comunidades como Boca del Cerro, la cabecera municipal de Tenosique y “El Triunfo” en Balancán.
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La inacción, advirtió el gremio, podría generar el fenómeno de la gentrificación, un proceso donde el aumento de la plusvalía inmobiliaria y el costo de vida termina por desplazar a los pobladores originarios de las zonas con mayor potencial de desarrollo económico y social generado por la nueva infraestructura.
La clave radica en que los planes municipales deben integrar y considerar el potencial económico y social que el Tren Maya inyectará a la región.
De no hacerlo, se perderá la oportunidad de canalizar de manera eficiente las nuevas dinámicas territoriales y financieras.
Los arquitectos tabasqueños subrayaron que el proyecto ferroviario es una plataforma de crecimiento sin precedentes, pero su beneficio debe ser incluyente y sostenible para la población que ya reside en estos puntos clave.
Además del Plan Municipal de Desarrollo, el presidente del CAT añadió que la cartografía de uso de suelo municipal juega un papel dual al ser la herramienta que “da apertura y límites” a la construcción y expansión de las manchas urbanas.
Por lo tanto, estos instrumentos deben revisarse de la mano para asegurar que el crecimiento sea regulado, protegiendo tanto los intereses de los inversionistas como los derechos de los actuales propietarios y residentes, con una visión de desarrollo territorial equilibrado a largo plazo.